Entre las tendencias que se están dando con más fuerza en el campo tecnológico de las empresas, la virtualización del datacenter ha ganado mucho terreno. Cada vez más compañías deciden pasar su centro de datos a una plataforma en la nube, en vez de utilizar servidores físicos dentro de sus instalaciones.
Ya sea que se trate de un modelo de nube pública, privada o híbrida para los especialistas de los departamentos de TI es fundamental aprovechar los recursos, facilitar su trabajo del día a día y garantizar que todos los procesos se estén realizando con la máxima seguridad.
A la hora de elegir un servicio de cloud debe pensar ¿qué valor estoy agregando a mi empresa?
Nube Pública vs. nube privada
Una nube privada consiste en un servicio de almacenamiento de datos al que se le añaden una serie de herramientas y aplicaciones que permiten una gestión avanzada de dichos datos. A diferencia de la nube pública, este no se basan en un hardware físico compartido, sino que tiene una infraestructura dedicada por completo a su negocio.
El servicio de cloud computing privado tiene múltiples ventajas, ya que ofrece toda la agilidad, escalabilidad y eficiencia de la nube pública, pero también proporciona mayores niveles de control y seguridad.
La privacidad: La característica principal, como su nombre lo indica, es el refuerzo de la privacidad en la empresa. El servicio de cloud privado garantiza que los datos almacenados se encontrarán protegidos en su totalidad, ya que nadie tendrá acceso salvo las personas autorizadas.
Personalización: Precisamente por ser privada y tener el control, su empresa contará con muchas más posibilidades de personalizar la nube: desde el aspecto, aplicaciones, organización de los datos, entre otros.
Regulaciones: Tener una nube privada le evitará grandes esfuerzos en investigación y gestión para estar al día con los requisitos reglamentarios y documentación que solicitan los gobiernos en el caso de las nubes públicas.
¿Y los costos?
Para algunas empresas, sobre todo pequeñas, contar con los servicios de una nube pública podría resultar beneficioso, sobre todo por el acceso que estas ofrecen.
Sin embargo para grandes empresas el costo real del cloud computing abierto puede ser mayor al esperado y se puede comenzar a incurrir en costos que no se tenían contemplados en un inicio. Se asume inicialmente que el software libre es gratuito, pero a menudo se pasan por alto los costos de instalación y despliegue, el costo de soporte, herramientas, costos de traslado y otros gastos relacionados que no son evidentes.
“La nube privada está indicada para aquellas empresas que buscan el mejor servicio a un buen precio, no el más barato” -Luis Carlos Rojas Kruse. CEO ADN Datacenters.
Con una nube privada usted no tendrá costos ocultos, y sabrá con mucha más exactitud los alcances del servicio que está pagando.
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ADN Datacenters es una empresa líder en servicios integrados de tecnología y cloud computing con infraestructura de clase mundial Tier III, que brinda soluciones personalizadas con estándares que garantizan la continuidad de su negocio.
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